Abel Martínez encontró un cementerio de chatarras y la ciudad sucia
Santiago. – La declaratoria de emergencia sanitaria en todo el municipio de Santiago, por parte del Concejo de Regidores, el mismo 16 de agosto del año 2016, fue el punto de inicio del primer período de Abel Martínez como alcalde, panorama que retrataba una ciudad llena de basura por todas partes y sin un parque vehicular para dar respuesta a esa triste realidad, además de grandes deudas con las empresas recolectoras y todo el comercio.
Martínez tuvo que recurrir a empresarios amigos para que prestaran sus vehículos, ya que la existencia de maquinarias y equipos, era solo en papeles, no había un solo vehículo disponible para emprender las acciones que demandaba Santiago en ese momento.
Hay que recordar cuando en su discurso de toma de posesión, Abel Martínez, describió en pocas palabras la situación encontrada, “Cuando un paciente se encuentra muy enfermo, requiere de los servicios de un especialista, necesita de una atención especial y Santiago, está grave y sin un chele”, dijo Abel Martínez.
El alcalde Abel Martínez, ha demostrado y reiterado con hechos en las instituciones públicas en las que ha servido, su férrea defensa al patrimonio del pueblo dominicano y en esta ocasión de los bienes del municipio de Santiago y asegura que bajo su gestión existen plenas garantías de que seguirá trabajando con estricto apego a la ley.
Conociendo la realidad encontrada, de una ciudad abandonada, arropada en basura, deudas superiores a los dos mil millones de pesos, sin vehículos, ni equipos, salió a las calles, dio el frente y al cabo de los primeros meses el panorama cambiaba favorablemente.
A la fecha, la ciudad está completamente limpia y el Ayuntamiento de Santiago, ya cuenta con una moderna flotilla de vehículos que fueron adquiridos en la presente administración, parque vehicular que está debidamente inventariado y auditado, prestando un servicio a todo el municipio, barrio por barrio, urbanización por urbanización y en todo el casco urbano y zonas sub urbanas, vehículos que reciben un mantenimiento y cuidado permanente.
Los documentos sobre el inventario de vehículos, dejados por pasadas gestiones municipales, eran solo papeles, muchos de los vehículos, nunca pudieron ser auditados físicamente por las presentes autoridades, eran chatarras, vehículos deshuesados, que era imposible identificar y otros que, aunque estaban en inventario, no se encontraban ni como chatarras.
Otros vehículos, de acuerdo al inventario dejado, se encontraban en talleres para fines de reparación y en muchos casos la cotización por reparaciones excedía el costo real de dichos vehículos, razón por la que resultaba muy oneroso para el cabido, pagar más por pagos de arreglos de lo que en realidad representaba como activo para la institución.
El inventario de vehículos dejado por la pasada gestión municipal, era sencillamente un cementerio de chatarras, situación que fue denunciada en el período de transición 2016-2020 y aun después de la llegada de Abel Martínez a la dirección del municipio.
Las presentes autoridades municipales hicieron todos los esfuerzos posibles para recuperar vehículos que estaban en talleres, pero los propietarios de los mismos no los entregaban por la falta de pago, incumplimiento de quienes debieron asumir la responsabilidad de saldar dichas deudas y quizás fueron acciones con fines determinados para poder hacerse de dichos equipos.
Dirección de Comunicación y Prensa, Ayuntamiento de Santiago
Jueves 20 de mayo 2021.