Santiago.-Ante los comentarios injustos en contra de miembros de la Policía Municipal, por su supuesta actuación arbitraria ante ¨un predicador¨ religioso que desde hace un tiempo intranquiliza en los entornos de la Catedral de Santiago, la Alcaldía de Santiago se ve en la necesidad de hacer algunas aclaraciones.
En el caso que nos ocupa, la Policía Municipal, se presentó al parque Duarte de esta ciudad, a requerimiento de feligreses de la iglesia católica y visitantes de dicho parque, que durante mucho tiempo han visto afectada la paz y el sosiego, por el uso permanente de un megáfono y bocinas por parte de dicho ¨predicador¨.
La persona en ningún momento se ha presentado ante las autoridades para solicitar el permiso correspondiente, el cual es obligatorio para realizar cualquier tipo de actividades en espacios públicos.
Los denunciantes motivaron sus quejas en el entendido de que los parques son lugares de esparcimiento para toda la familia, donde la gran mayoría acude a ellos a descansar y hasta a leer un libro y que la actuación de dicho ¨predicador¨ mantiene en zozobra la convivencia en el referido parque.
Feligreses que acuden a la Catedral de Santiago, saludaron la medida de la Alcaldía, ya que venían quejándose de que ¨el predicador¨ interrumpía los servicios religiosos que se realizan allí y que en muchas ocasiones vociferaba insultos contra la propia iglesia católica.
Otros ciudadanos también se han expresado a través de las redes sociales y se han puesto del lado de las autoridades, ya que han vivido la intranquilidad que genera ese ciudadano, como es el caso de Manuel Rafael Rodríguez, que lo hizo a través de la red social Facebook.
El señor Rodríguez se quejó del desorden que representa la presencia de dicho predicador durante largas horas en el parque, impidiendo el sosiego y la tranquilidad de quienes acuden allí.
Los miembros de la Policía Municipal, trataron por todos los medios de que el señor se sometiera al orden, encontrando como respuesta que el ciudadano la emprendiera contra ellos, llegando incluso a lanzar objetos al vehículo de la institución, causándole algunas abolladuras, es ahí cuando los policías actuaron en consecuencia y lograron retirar a dicho señor del espacio público, ya que no contaba con el permiso correspondiente para realizar dicha actividad.
Las autoridades municipales reconocen a nuestro Dios, como un Dios de Paz, de orden, de respeto, que no promueve, ni apoya acciones que no estén bajo las leyes, normas y resoluciones que rigen al municipio y que ¨el predicador¨ ha actuado contrario al mandato de esas leyes y normas que establecen vivir en una sociedad organizada.
El alcalde Abel Martínez, garantiza la participación de cualquier grupo o persona, que amparado en las normas y leyes vigentes se presente ante las autoridades del municipio y solicite los permisos correspondientes y que siempre y cuando, no transgreda esas regulaciones, contará con la autorización correspondiente.
Dirección de Prensa, Alcaldía de Santiago, domingo 19 de marzo 2017